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| Cartón Corrugado |
El cartón corrugado ha estado vigente en el mercado por ser un material de embalaje desde mediados del siglo XIX y en la industria del empaque, el uso de este tipo de cartón para la elaboración de cajas revolucionó la manera de almacenar y transportar los insumos.
El diseño de este cartón para cajas, está conformado simplemente por dos hojas planas conectadas a una capa ondulada intermedia, lo cual significa una solución de fabricación versátil, adaptable a una extensa escala de exigencias técnicas y con una excelente rigidez y resistencia para proteger la mercancía apropiadamente.
Por otra parte su entrada como material de embalaje fue tan importante que desde 1903 el gobierno de Estados Unidos aprobó al cartón corrugado como material oficial para la fabricación de cajas, convirtiéndose en una gran contribución para hacer más eficiente el sistema de almacenamiento y distribución de diversos tipos de productos.
Más de 100 años han transcurrido y el cartón corrugado aun se encuentra vigente, entre sus múltiples ventajas, tenemos:
Su flexibilidad para fabricación: No solo posee un bajo costo de producción, puesto que puede ser cortado y troquelado en una gran variedad de medidas para así cumplir con unas especificaciones
La Materia prima es de bajo peso: Con esto se facilita la reducción de costos de transportación.
Es reciclable: Esta es quizás una de sus ventajas más importantes ya que permite a la perfección la aplicación de políticas sustentables.
Es un material recomendable para impresión: El cartón corrugado es un material que puede adaptarse fácilmente a un proceso de identificación de producto para una integración completa en la cadena de distribución. Se puede agregar información, imágenes y color que ayudan a la comunicación gráfica y mercadotecnia del producto.
La caja de cartón se une a la línea de elaboración como empaque genérico y a través de la impresión y aplicación de etiquetas o de la tecnología de inyección de tinta de baja o alta resolución, es viable codificar información vital del producto como lote de producción, cantidad de unidades, fechas de consumo preferente, país de origen, destino y códigos de barra.
Por lo cual la identificación adecuada del empaque secundario hace más eficiente y eficaz todo el proceso de inventario y almacenamiento, generando así importantes reducción de costos al reducir materias primas y las necesidades de volumen para almacenar.
De igual forma, más allá de un instrumento de protección para el producto fabricado, las cajas de cartón se convierten en una maravillosa herramienta de información entretanto el proceso de distribución ya que hace posible rastrear el producto en caso de que ser necesario retirar algunos lotes del mercado.
Para extender los beneficios de la codificación en el empaque secundario, el gerente de planta debe contar con asesoría externa imparcial para conocer cuáles son los requisitos para la captura electrónica de información de acuerdo a su giro de negocio.
A continuación se aconseja realizar un análisis a conciencia de sus procesos para emparejar las áreas de oportunidades en el área de costos y en la operación, así como también, determinar la información que necesaria para incorporar y así hacer más eficiente la cadena de suministro.
Un ejemplo de esto es que existen empresas que se esfuerzan por imprimir códigos de barra en la caja de cartón, destinan la inversión y en la realidad los códigos nunca se leen, por lo cual, no se logran los ahorros que la empresa buscaba en un principio
Esto quiere decir que cada vez son más las empresas que, más allá de operar para cumplir con las normas, persiguen concebir ahorros e incorporar prácticas de sustentabilidad. Ante esta preferencia, la codificación en el empaque secundario es una excelente alternativa que contribuye a incrementar la productividad.
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